Es un método no invasivo de crear imágenes detalladas de los espacios llenos de aire dentro del cráneo. Estos espacios se denominan senos paranasales.
A diferencia de las radiografías y la tomografía computarizada (TC), que utilizan radiación, la resonancia magnética utiliza imanes y ondas de radio potentes. Las señales del campo magnético rebotan del cuerpo y se envian a una computadora, donde se convierten a imágenes. Los diferentes tipos de tejidos devuelven señales diferentes.
Las imágenes por resonancia magnética solas se denominan cortes y se pueden almacenar en una computadora o imprimir en una película. Un examen produce docenas o algunas veces cientos de imágenes.
A usted le pueden solicitar que use una bata de hospital o prendas de vestir sin broches metálicos (como pantalones de sudadera y una camiseta). Ciertos tipos de metal pueden causar imágenes imprecisas.
Usted se acostará sobre una mesa estrecha, la cual se desliza hasta la mitad de la máquina que toma las imágenes por resonancia magnética (IRM). Si le teme a los espacios confinados (sufre de claustrofobia), coméntele al médico antes del examen. Le pueden dar un medicamento para ayudarlo a que le dé sueño y que esté menos ansioso, o el médico puede recomendar una resonancia magnética "abierta", en la cual la máquina no esté tan cerca del cuerpo.
Se colocan pequeños dispositivos, llamados espirales, alrededor de la cabeza. Estos dispositivos ayudan a enviar y recibir las ondas de radio y mejoran la calidad de las imágenes.
Algunos exámenes requieren un colorante especial (medio de contraste), el cual generalmente se administra antes del examen a través de una vena (intravenoso) en la mano o el antebrazo. Este medio de contraste ayuda al radiólogo a observar ciertas áreas más claramente.
Durante la resonancia magnética, la persona que opera la máquina lo vigila a uno desde otro cuarto. Generalmente, se necesitan varias series de imágenes, cada una de las cuales tarda de 2 a 15 minutos. Dependiendo del tipo de equipo, el examen puede tomar una hora o más.
Antes del examen, coméntele al radiólogo si está recibiendo diálisis, ya que esto puede afectar el hecho de si usted puede o no recibir un medio de contraste intravenoso.
Si usted le teme a espacios confinados (sufre de claustrofobia), coméntele al médico antes del examen. Le pueden dar un medicamento para ayudarlo a que le dé sueño y que esté menos ansioso, o el médico puede recomendar una resonancia magnética "abierta", en la cual la máquina no esté tan cerca del cuerpo.
Los fuertes campos magnéticos que se crean durante una resonancia magnética pueden interferir con ciertos implantes, particularmente marcapasos. Por lo tanto, las personas con marcapasos cardíacos no pueden someterse a una resonancia magnética y no deben ingresar al área donde se realizan estos procedimientos.
Es posible que a usted no le puedan hacer una resonancia magnética si tiene cualquiera de los siguientes objetos metálicos en el cuerpo:
Coméntele al médico si usted tiene uno de estos dispositivos cuando le programen el examen, de manera que se pueda determinar el tipo exacto de metal.
Antes de una resonancia magnética, a las personas que trabajan con láminas de metal o cualquier persona que pueda haber estado expuesta a pequeños fragmentos metálicos se les debe tomar una radiografía del cráneo para verificar si tienen metal en los ojos.
Debido a que la máquina para la resonancia magnética contiene un imán, los objetos que contengan metal como lapiceros, navajas y anteojos pueden salir volando a través del cuarto. Esto puede ser peligroso, así que tales elementos no se permiten dentro del área del escáner.
Tampoco se permiten otros objetos metálicos dentro de la sala:
Una resonancia magnética no causa dolor. Algunas personas pueden volverse ansiosas dentro del escáner. Si usted tiene dificultad para permanecer quieto o está muy ansioso, se le puede dar un sedante suave. El movimiento excesivo puede ocasionar errores e imágenes borrosas en la resonancia.
La mesa puede sentirse dura o fría, pero usted puede solicitar una frazada o una almohada. Dado que la máquina emite ruidos sordos o zumbidos fuertes al encenderse, se pueden usar protectores de oídos para ayudar a reducir el ruido.
Un intercomunicador en el cuarto le permite a usted hablar con el operador del escáner en cualquier momento. Asimismo, algunos equipos para resonancia magnética tienen televisores y audífonos especiales que usted puede utilizar para ayudar a pasar el tiempo.
No se requiere un período de recuperación, a menos que se necesite sedación. Después de una resonancia magnética, usted puede reanudar la dieta, actividades y medicamentos normales.
Este examen suministra imágenes detalladas de los senos paranasales. El médico puede solicitar este examen si usted tiene:
El médico también puede solicitar este examen para:
Los diferentes tipos de tejidos devuelven señales de resonancia magnética distintas. Por ejemplo, el tejido sano devuelve una señal ligeramente diferente a la del tejido canceroso.
Los resultados anormales puede deberse a:
Consulte con el médico si tiene preguntas e inquietudes.
La resonancia magnética no utiliza ninguna radiación ionizante y, hasta la fecha, no se han presentado efectos secundarios significativos documentados de los campos magnéticos y las ondas de radio utilizadas en el cuerpo humano.
El tipo de medio de contraste (tinte) utilizado más común es el gadolinio, el cual es muy seguro. Las reacciones alérgicas a esta sustancia rara vez ocurren. La persona que opera la máquina vigilará su frecuencia cardíaca y su respiración.
En muy pocas ocasiones, las personas con insuficiencia renal o nefropatía crónica pueden desarrollar una reacción grave pero inusual al medio de contraste (tinte). Si usted tiene problemas del riñón, es importante comentarle al técnico en resonancia magnética y al médico antes de recibir este tinte.
La resonancia magnética generalmente no se recomienda para situaciones de traumatismo agudo, debido a que el equipo de tracción y de soporte vital no puede ingresar al área del escáner de manera segura y el examen puede tomar algo de tiempo.
Algunas personas se lesionaron en las máquinas de resonancia magnética cuando no se quitaron los objetos metálicos de sus ropas o cuando otras personas dejaron objetos de metal en el cuarto.
Los exámenes que pueden hacerse en lugar de una resonancia magnética de los senos paranasales incluyen:
Una tomografía computarizada puede ser preferible en casos de emergencia, ya que es más rápida y normalmente está disponible directamente en la sala de urgencias.
Nota: la resonancia magnética no es tan eficaz como la tomografía computarizada en la definición de la anatomía de los senos paranasales y, por lo tanto, no se usa normalmente para una presunta sinusitis aguda.
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